Un enfrentamiento entre pasajeros de trenes con la policía dejó un saldo de 21 heridos y al menos 16 detenidos en Capital Federal. Cientos de pasajeros estaban enfurecidos ayer por la suspensión de los servicios ferroviarios, lo que provocó destrozos en una de las estaciones centrales porteñas. Los disturbios se registraron, durante casi dos horas, en la estación de Constitución, que une Buenos Aires con localidades del sur del conurbano.
Los disturbios se desataron después de la suspensión de los servicios de trenes a causa de la avería de una formación sobre una de las vías.
Los pasajeros, enfurecidos, empezaron a romper las boleterías, oficinas de informes, teléfonos públicos y demás instalaciones de la estación terminal.
Además de saqueos, el caos también afectó a los alrededores de la terminal. Miles de pasajeros desbordaron las paradas de colectivos en búsqueda de un medio de transporte para volver a casa. Y el tránsito tuvo que ser interrumpido.
La Infantería utilizó gases lacrimógenos y balas de goma para desalojar a los manifestantes del hall. Los enfrentamientos, sin embargo, continuaron en los andenes, donde grupos de pasajeros atacaron con piedras a los efectivos.
